Lucir una piel radiante con un brillo natural especial es sinónimo de belleza. Y si bien procuramos balancear nuestra dieta, beber agua y hacer ejercicio, siempre viene bien una ayuda extra. Con esta mascarilla conseguirás que tu rostro se vea suave y terso. Se prepara en unos minutos y los resultados te encantarán.
Cómo preparar una mascarilla para tener una piel radiante
Para empezar, es importante que tu rostro esté perfectamente limpio. Esto permitirá que tu epidermis absorba las sustancias benéficas de la mascarilla. Además, para preservar la acción de la mascarilla y lucir una piel radiante es preciso aplicar humectante y bloqueador solar a diario.
Ingredientes:
1 kiwi
Esta fruta contiene vitamina C, E y antioxidantes, gracias a los cuales, propicia la regeneración de las células de las pie, por lo que ayuda a mantener su tersura y juventud.
1 cucharada de miel
Su rico contenido de alfa hidroxiácidos favorece la exfoliación natural de la piel y sus minerales y vitaminas, la nutren y humectan. Gracias a eso conserva su elasticidad y suavidad por más tiempo.
1 limón
El limón posee elevadas dosis de vitamina C que favorece la aclaración de la piel, además de retrasar la aparición de arrugas prematuras.
1/2 taza de yogur natural
El ácido láctico y el zinc que contiene el yogur favorece la exfoliación natural de la piel, por lo que ayuda a eliminar brotes de acné.
Preparación:
Pela y rebana el kiwi.
Parte el limón a la mitad.
Coloca los ingredientes en la licuadora.
Añade unas gotas de jugo de limón.
Licua hasta que se forme una pastita.
Aplica con una brocha y deja reposar 10 minutos.
Retira con un pad de algodón húmedo.
Humecta tu rostro.
No olvides que una vez retirada la mascarilla es preciso humectar tu cutis. Si la aplicas de día, es necesario que también extiendas una capa de bloqueador solar. Para ver resultados más pronto, cuida de añadir kiwi y yogur a tu dieta. Además convendría que bebieras agua suficiente para mantenerte hidratada y radiante.